Cada año entre el 16 y el 22 de septiembre tiene lugar la Semana Europea de la Movilidad, una iniciativa surgida en 1999 y apoyada desde el año siguiente por la Comisión Europea.
El ámbito de participación ya supera al territorio de la Unión y en la edición de 2017 serán 48 países y 2270 ciudades las adheridas a esta celebración.
El objetivo es concienciar a los ciudadanos para que hagan un uso más responsable y ecológico de sus desplazamientos enfocándose en promover el uso del transporte público, la bicicleta y compartir vehículos privados en los movimientos diarios urbanos y metropolitanos siendo el día 22 el día de "la ciudad sin mi coche" evento estrella durante el cual muchas poblaciones europeas cierran casi completamente al tráfico zonas destacadas de sus centros históricos.
Dentro de la movilidad diaria en entornos urbanos y metropolitanos, el ferrocarril juega sin duda un papel destacado por su capacidad de transporte.
Si nos ponemos a analizar la movilidad en nuestra comunidad nos encontramos con luces y sombras para quien quiera moverse por Galicia en tren como alternativa al vehículo privado.
La luz la pone sin duda el Eje Atlántico de Alta Velocidad, un auténtico éxito de viajeros y ejemplo de vertebración entre A Coruña y Vigo y estando en medio del trayecto entre las dos grandes urbes gallegas, la capital, Santiago y Vilagarcía de Arousa y Pontevedra.
El tiempo de viaje entre las dos mayores ciudades galaicas, en servicio MD, cubierto por trenes s-121 oscila entre 1h 20m y 1h 36m. Si queremos viajar a la capital de Galicia sólo 27/28 minutos dura el trayecto desde A Coruña y 50 minutos desde Vigo.
Unos tiempos de viaje muy competitivos con el vehículo particular que además del gasto en combustible hay que sumar los peajes de la autopista AP-9 que en algunos tramos son elevados en relación a los kilómetros recorridos.
Movilidad es sin duda un adjetivo que puede aplicarse al Corredor Atlántico. Sus tiempos de viaje y horarios permiten realizar con flexibilidad todo tipo de actividades laborales, académicas o turísticas.
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| S-121 entrando en la estación de Santiago de Compostela. |
La cruz de la movilidad gallega está en los servicios (o ausencia de ellos) de cercanías que hacen de nuestra comúnidad la única con áreas metropolitanas (Vigo y A Coruña) sin trenes de proximidad.
Sólo las comarcas de Ferrolterra y Ortegal cuentan con trenes de cercanías entre Ferrol y Ortigueira en la línea de vía estrecha de la antigua FEVE hoy explotada por Renfe. Sus frecuencias son de 30 minutos en hora punta entre Ferrol y la cercana Xuvia, 13 servicios diarios por sentido hasta San Sadurniño y 7 servicios diarios a Ortigueira (en días laborables de lunes a viernes).
Desde la integración en Renfe las líneas de vía estrecha viven una total dejadez que hacen frecuentes las supresiones de servicio , los retrasos o los traslados en autobús . La falta de personal y de trenes son la causa de estos incidentes que se repiten con relativa frecuencia haciendo que la única línea gallega de proximidad sufra un descenso paulatino del número de viajeros.
El 2905 realizando un servicio de cercanias
entre Ferrol y Xubia.
El concepto de tren de cercanías es desconocido en las dos grandes áreas metropolitanas gallegas (A Coruña y Vigo). Las importantes inversiones en infraestructura que se llevan a cabo en nuestra tierra han dejado de lado la implantación de cercanías pese a ser un tema que con relativa frecuencia sale a la luz en ámbitos políticos y económicos.
El principal handicap es la no existencia de vía doble en los trayectos en principio más adecuados que son A Coruña-Ferrol y Pontevedra -Vigo . En el caso de la primera línea además de la no existencia de doble vía se une un trazado sinuoso apenas modificado desde su inauguración haciendo que viajar de la capital coruñesa hasta Ferrol se convierta en un bonito pero escasamente útil trayecto.
Ambas áreas metropolitanas superan los 400.000 habitantes y resulta chocante la no existencia ni la elaboración de ningún proyecto de proximidades (cercanías en gallego). Tampoco existen planes para el resurgir de tranvías, en otros tiempos punteros.
Unidad 450 de Cercanías Madrid en la estación de Meco
Por tanto el transporte público en las zonas más pobladas de Galicia se reduce al autobús el cual como el resto del tráfico sufre los atascos de entrada y salida como los demás vehículos siendo algunos accesos a A Coruña y Vigo auténticos embudos de difícil escapatoria en caso de embotellamiento.
La prioridad en Galicia en estos momentos es la llegada del AVE. Se está realizando una gran inversión en el tramo Ourense-Zamora y la fecha de llegada de la alta velocidad es tema recurrente en la prensa, parlamento, gobierno y diversos sectores económicos autonómicos.
Quizá habría que plantearse si no merecería la pena retrasar un poco o ralentizar las obras del AVE para invertir en el ferrocarril más próximo en Galicia. Esto no sólo incluiría a los hipotéticos cercanías sino a una idea de movilidad total a nivel gallego en el que ninguna ciudad quedara ausente a la hora de planificar unas buenas comunicaciones interiores.
En Galicia no es tan fácil que tenga cercanías como en otros puntos de España porque en Galicia hay poca densidad de población en algunas zonas. Desde luego si se quiere una linea de cercanías ya la había antiguamente explotada por regionales haciendo paradas en todos los apeaderos y con nula aceptación . Cercanías≠Velocidad. Y por otro lado los trenes que circulan entre Santiago y Coruña circulan cada hora o cada menos de cada hora dando intervalos de incluso 5 minutos entre dos servicios. No veo inconveniente en las frecuencias.
ResponderEliminarEl concepto de cercanías y regionales es totalmente diferente. Los trenes regionales que recorren las zonas menos pobladas y paran en la mayoría de los apeaderos nunca fueron cercanías. Los cercanías son trenes que atraviesan zonas con alta densidad de población y bastantes frecuencias a lo largo del día. Como dice el artículo en Galicia hay dos áreas metropolitanas muy pobladas (Vigo y A Coruña) con grandes problemas de tráfico en sus accesos donde se podrían implantar cercanías. Eso implicaría hacer dobles vías entre otras inversiones aunque comparado con otras obras de mayor envergadura sería relativamente barato.
ResponderEliminarLa población en Galicia es muy dispersa no hay alta concentración de habitantes en un punto .
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